Prensa MPP- Despacho (RA/ 17.05.21) Josefa Camejo es una de nuestras mujeres que enaltecen el gentilicio venezolano. Heroína de la Guerra de La Independencia, se distinguió por ser la protagonista del alzamiento en la Península de Paraguaná en favor de la República, aquel 3 de mayo de 1821.

Nació en la población de Curairebo el 17 de mayo de 1791: Recibió su formación de primeras letras en la ciudad de Coro, completando su educación en un convento de monjas en la misma ciudad. Durante su juventud, y a raíz del 19 de abril de 1810, Camejo tuvo inclinación y simpatía por las ideas liberales que impulsaron el proceso de la Independencia. Ella se encontraba en Caracas y tuvo la oportunidad de ser testigo presencial de la deposición del Gobernador y Capitán General de Venezuela, Vicente Emparan, y de la Junta de Gobierno instalada por el Cabildo de Caracas.

Contrajo nupcias en la ciudad de Mérida en 1811 con el coronel Juan Briceño Méndez mudándose seguidamente a la ciudad de Barinas. Allí se hizo célebre junto con otras valientes mujeres venezolanas al dirigir un manifiesto al Gobernador el 18 de octubre de 1811, conocido como "Representación que hace el bello sexo al Gobierno de Barinas" donde exclaman: "lejos de temer a los horrores de la guerra, el estallido del cañón no hará más que alentarlas". Este manifiesto se produce ante la incursión de las tropas realistas que amenazaban con invadir Barinas por San Fernando.

Durante toda la guerra, Josefa Camejo siempre participó apoyando la causa de la Republica. En 1813 se vio obligada a emigrar de Barinas ante el avance del enemigo, en su marcha hacia San Carlos su madre murió ahogada durante el cruce del río Santo Domingo. Al llegar a su destino, recibe la protección del ejército del general Rafael Urdaneta que decide emigrar hacia la Nueva Granada. Eran los años de la Guerra a Muerte. A partir de entonces, Camejo participa activamente en las faenas del ejército destacando su participación en la atención de los heridos.

En la Nueva Granada permaneció por espacio de 4 años, pero con la añoranza de su patria, decidió regresar a su tierra paraguanera viajando disfrazada de mendiga y campesina para pasar desapercibida de las patrullas realistas. Fue así como regreso a su hato en el año 1818.

Recordemos que durante toda la Guerra de Independencia, la Provincia de Coro estuvo fiel a la corona española, por lo que no era labor sencilla simpatizar con la República en medio del espionaje realista sobre la población. Las causas de infidencia se castigaban con la pena de muerte. Sin embargo, hace 200 años el destino le tenía reservado su impronta de gloria a esta heroína venezolana.

El 3 de mayo de 1821 durante el avance de la División del general Urdaneta desde Maracaibo, en la Campaña de Liberación de la Provincia de Coro, y en el marco de la Campaña de Carabobo, Josefa Camejo con un arrojo asombroso, liderando ella misma a una partida armada republicana, capitaneó un asalto, y ella con fusil en mano logró derrotar el destacamento del jefe realista Chepito González, a quien hizo huir. Inmediatamente se dirigió al frente de sus hombres a la plaza de Pueblo Nuevo en la Península de Paraguaná, para levantar a la población contra las autoridades realistas, ganando el apoyo del comandante Segundo Primera para reducir a prisión al Gobernador.

Ese día 3 de mayo de 1821, la misma heroína Josefa Camejo leyó un manifiesto en Pueblo Nuevo declarando la libertad de la Provincia de Coro, y jurando lealtad a la República. La jornada militar de la Campaña de Carabobo fue protagonizada por el sacrificio impertérrito de hombres y mujeres, como nuestra Josefa Camejo.

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