Prensa Mppdpsgg (Ingrid Carvajal Arroyo/ 12.04.18).- La VIII Cumbre de las Américas terminó sin pena ni gloria y, tal y como lo señaló el presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, resultó un fracaso, del que se desprendió un tímido compromiso sobre gobernabilidad democrática frente a la corrupción, con el antecedente de que semanas antes el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, se vio obligado a renunciar en medio de un escándalo de corrupción. Sin embargo, la voz de Bolivia se alzó para condenar la exclusión y parar el golpismo en Venezuela.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, habló con contundencia al demandar al imperio estadounidense detener la masacre de inocentes en Siria, levantar el bloqueo criminal contra Cuba, parar el golpismo en Venezuela y suspender su muro racista contra México.

Morales condenó las sanciones y amenazas de invasión realizadas por los Estados Unidos en contra de Venezuela y precisó: "nuestra región no es patio trasero de nadie. Lamentamos que el hermano Nicolás Maduro no este sentado con nosotros, producto de las presiones de los Estados Unidos".

De seguidas precisó: "es nuestro deber insoslayable hablar de las amenazas que enfrenta nuestro hemisferio y el mundo entero, la principal amenaza contra la paz, la democracia, la libertad, la Madre Tierra y el multilateralismo: es EEUU".

OEA tiene que definirse: integra o excluye

El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia consideró que todo lo que se diga en esa Cumbre sería insuficiente. "En tanto, no existan controles eficaces, contra el narcotráfico o contra el terrorismo, hoy pretenden utilizar una falsa lucha contra la corrupción, para derrocar gobiernos legítimos y para criminalizar proyectos políticos de cambio".

Además, se refirió a la Organización de Estados Americanos, OEA, sobre la cual expresó: "tiene que definirse; es una organización de integración o un instrumento de exclusión, respeta la soberanía de los pueblos o es un títere neocolonial. Bolivia exige que se levante el bloqueo económico que EEUU impone contra Cuba y que sea devuelto Guantánamo".

El líder indígena boliviano aprovechó su derecho de palabra, en la Cumbre de las Américas para rendir homenaje y respeto a quien consideró "el hermano Lula. Que el mundo sepa que no puede encarcelar la conciencia de un pueblo. Que escuche el mundo: el fiscal, que presidió la comisión en el proceso, dijo textualmente que no hay pruebas contra Lula, pero sí convicciones".

A juicio de Evo Morales, "el mundo atraviesa una serie de guerras y una terrible crisis humanitaria, ocasionadas por el intervencionismo estadounidense. Producto de la pobreza, la desigualdad y cambio climático, atravesamos una crisis migratoria y Estados Unidos construye muros y envía tropas para invadirnos", precisó.

Expresó solidaridad con el pueblo de México y llamó a sus autoridades "a que miren hacia el sur, a su casa latinoamericana. Desde México hasta Argentina, nuestra región está libre de armas nucleares y es una zona de paz".

Solicitó el reconocimiento de los derechos dela Madre Tierra y que se emprendiera una lucha contra el capitalismo, el colonialismo y el imperialismo y, concluyó declarando: "No son tiempos de competitividad, sino tiempos de complementariedad. No son tiempos de muros de enfrentamiento, sino de puentes de entendimiento".

El discurso del Presidente boliviano fue publicado, a través de su red social en Twitter, @evoespueblo, en una serie de tuits.

Foto: Cortesía